Cuando nos encontramos con un caso tan evidente como el del torturador de los Jemeres Rojos, que es todavía un caso que se sigue juzgando, parece increíble que esta persona se defienda de tales evidencias, pero este tipo de personas no tiene conciencia y se defenderá de la manera más increíble, ya que los abogados de la defensa presentarán a este torturador apodado Duch como una víctima de Pol Pot y no como una persona que asesinó a una serie de personas y que por lo tanto tiene que estar el resto de su vida en la cárcel.

Parece increíble que esta persona pueda ser una víctima de Pol Pot y que actuara sin que le gustara lo que hizo, porque no es lo que nos da la sensación. Este tipo de personajes no se arrepiente de nada y lo que no quiere es pasar sus pocos años de vida entre rejas, que es lo más normal que le pueda suceder. Sin duda alguna en un caso muy claro y la justicia tendría que actuar en consecuencia, porque esta persona no puede quedar impune de estos casos de asesinatos.

El hecho de estar obligado a hacer lo que hizo no es precisamente una excusa, porque si a Duch le pudiéramos llamar víctima, entonces es complicado pensar el nombre de las personas que podrían recibir todas las personas que fueron asesinadas y torturadas por esta persona, que merece todo el castigo posible y que no salga de la cárcel mientras siga vivo, que es lo más justo en estos momentos. Esta defensa que hace no es algo que se deba tener en cuenta, porque no es ni mucho menos una víctima, sino un cómplice.

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